Bienes culturales protegidos: El Sitio Etnológico "Los Pozos de Nieve de Izaña" (Tenerife).

DECLARACIÓN.- Los pozos de nieve de Tenerife servían, además de los de La Palma y Gran Canaria, para comerciar con todo aquel hielo que había podido ser recogido. Ya en 1850, en La Orotava, se expidieron permisos para poner en marcha varios de estos pozos en los que no solo se recogía la nieve, sino que se protegía para ser llevada, por ejemplo, al Puerto de Santa Cuz de Tenerife. Allí se utilizaba para conservar los alimentos o para fines terapéuticos.

Una vez caída la nieve, la misma se guardaba de manera protegida y compactada. Se podían recoger de modo natural, en cuevas, o en neveros, que eran construcciones revestidas con prismas basálticos sin labrar a modo de bloques. “Durante el deshielo, la nieve acumulada en estos recipientes excavados en el terreno, era cubierta con ramas de retama y pinocha, maderas y material piroclástico, para posteriormente ser recolectado y transportado por arrieros a lomo de bestias hasta los núcleos de población”, tal y como recoge el Ayuntamiento de La Orotava.

En efecto, por el Decreto 25/2009, de 3 de marzo, el Gobierno de Canarias declaró Bien de Interés Cultural, con categoría de Sitio Etnológico "Los Pozos de Nieve de Izaña", situados en el Parque Nacional del Teide, término municipal de La Orotava, en la isla de Tenerife, delimitando su entorno de protección, si bien algunos se ubican en los municipios de Güímar y Arafo.

Los pozos de nieve responden, en general, a una misma tipología, que experimenta variaciones puntuales relacionadas con su profundidad, amplitud, lugar de ubicación y otros, si bien todos ellos poseen forma cilíndrica, excavándose en diferentes puntos de las laderas de Montaña de Izaña.

El primero de los pozos posee un diámetro aproximado de 6-7 m, mientras que su profundidad alcanza los 8 m, accediéndose al interior por una escalera helicoidal fabricada con bloques basálticos que sobresalen del muro de revestimiento interno del pozo. Éste estaba fabricado con bloques lávicos sin trabajar, aparejados sin ningún tipo de mortero y aprovechando las irregularidades de estas rocas para garantizar su estabilidad.

El segundo de los pozos posee un diámetro similar y una profundidad considerablemente menor; si bien el relleno de picón hace imposible determinar su altura exacta. Al exterior, se construyó un grueso muro de bloques, de idéntica factura, cuyo fin era el de reforzar ambas construcciones -a modo de muro de contención- y evitar que los pozos se desmoronaran pendiente abajo. En el reborde inferior se entrevén otros lienzos de muro, que pudieran tener idéntica finalidad o configurar el antiguo camino de acceso hasta ellos.

El tercero de los pozos, situado a una cota superior de la ladera septentrional de Montaña de Izaña, tiene la misma forma cilíndrica, con un diámetro de unos 6 m, encontrándose igualmente relleno de picón y dotado de peldaños para acceder a su interior.

El pozo de nieve de la Fuente del Mal Abrigo (en Güímar) presenta idéntica tipología que los anteriores, si bien su estado de conservación es considerablemente peor. En sus proximidades se localiza una fuente natural utilizada históricamente por pastores, apicultores y, en general, por todos aquellos que desarrollaban algún tipo de actividad económica en este sector de las cumbres de la isla (en este caso, en la parte alta del Valle de Güímar).

DELIMITACIÓN.- La delimitación queda configurada por dos islotes, de tal manera que el primero de ellos tiene como punto origen el situado en la margen meridional de la carretera La Laguna-Las Cañadas (TF-24), en el p.k. 35, con unas coordenadas U.T.M. (352.665; 3.132.414); desde donde prosigue en línea recta en dirección este hasta alcanzar la cota 2.340 m.s.n.m. en el punto con coordenadas U.T.M. (352.793; 3.132.375). A partir de aquí se ajusta a la citada isohipsa en dirección NE, hasta alcanzar el punto con coordenadas U.T.M. (353.006; 3.132.545), desde donde prosigue en línea recta y dirección NO hasta conectar con la margen sur de la carretera antedicha, en el punto con coordenadas U.T.M. (352.779; 3.132.791). El perímetro se cierra desde este punto hasta el punto origen siguiendo dicho margen de la carretera.

El segundo de los islotes acoge el pozo de nieve de la Fuente del Mal Abrigo, teniendo como punto de inicio el situado en la margen sur de la carretera TF-24, en su intersección con la isohipsa 2.200 m.s.n.m., con coordenadas U.T.M. (353.161; 3.133.061). Avanza hacia el sur por dicha cota hasta intersectar el eje de un barranquillo en el punto con coordenadas U.T.M. (353.301; 3.132.645), prosiguiendo por éste aguas abajo hasta intersectar la isohipsa 2.075 m.s.n.m. en el punto con coordenadas U.T.M. ( 353.562; 3.132.684). Continúa por dicha cota hasta alcanzar el eje de otro barranquillo en el punto con coordenadas U.T.M. (353.696; 3.132.991), continuando por el mismo hasta conectar con el eje de la citada carretera TF-24 en el punto con coordenadas U.T.M. (353.380; 3.133.233), por el que se cierra el perímetro retornando al punto origen.

JUSTIFICACIÓN DE LA DELIMITACIÓN.- La delimitación del ámbito de protección se justifica por la necesidad de preservar el entorno de un conjunto de elementos etnográficos de gran singularidad e interés histórico y patrimonial con una delimitación lo suficientemente amplia como para garantizar su conservación, máxime si se tiene en cuenta el riesgo que supone la proximidad a la carretera y el posible diseño de proyectos de ampliación de la misma. El entorno de protección acoge el ámbito natural, correspondiente a un ecosistema de alta montaña, que rellena el espacio entre los distintos pozos de nieve o que los circunda, constituyendo un referente paisajístico indispensable para la mejor comprensión histórica del bien, así como para prevenir la aparición de afecciones que incidan en los pozos o de impactos visuales que repercutan en la contemplación y estudio de los mismos.

Foto de la Cueva del Hielo, en El Teide.

Fuente: BOC nº 47, martes 10 de Marzo de 2009.